Ven y Sigueme!!
¿Quién puede ser un religios@?
Ante todo conviene entender que existe una llamada universal a la perfección cristiana. Todo cristiano está llamado a seguir el ejemplo de Jesús. Dentro de esa llamada universal a la perfección, hay algunos miembros de la comunidad de la Iglesia que a través de la vocación optan por el seguimiento de Cristo en la vida religiosa. Para ser religioso o religiosa, por tanto, es necesario tener vocación a este estilo de vida: a estar dispuesto a compartir con los demás la propia existencia, a encontrar sentido a la vida en comunidad para el seguimiento de Jesús, a ser capaz de adoptar unos compromisos concretos de vida espiritual y material…
¿Qué tengo que hacer para llegar a ser religios@?
En primer lugar, tienes que descubrir en ti la llamada del Señor, es decir, descubrir tu vocación. A través de ella entenderás tu misión de servicio a la comunidad y cuál es la voluntad de Dios para tu vida. Para ayudarte a descubrir tu vocación te podrá orientar algún sacerdote, religioso, religiosa o cristiano convenientemente formado. Una vez que haya realizado tu discernimiento vocacional y descubierto la voluntad de Dios en tu existencia, tienes que dar un segundo paso, buscar a qué Congregación, en la que tú creas que podrás realizar la misión de servicio que Jesucristo te ha encomendado de manera particular.
Los religiosos y religiosas tienen tres características en común:
Han consagrado su vida a Dios mediante los votos públicos
de pobreza, castidad y obediencia en una misma Congregación religiosa.
Viven en comunidades donde comparten su experiencia de fe.
Renuncian al mundo.
Esto no significa que se desentienden del mundo,
sino de los afanes materiales al que el mundo les invita.
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Las etapas de formación de nuestra Congregación de
Hermanas Dominicas de la Doctrina Cristiana son:
Aspirantado - Postulantado.
En el postulantado, la joven, va conociendo a través de las orientaciones y clases de su maestra, como encauzar su vida, organizarla y realizar las distintas actividades del convento: como lo es la oración, el estudio, el trabajo, la vida de comunidad y apostolado.
El postulantado, que dura un año, es un período de crecimiento tanto a nivel humano como espiritual, en el cual la joven, busca hacer de su vocación una historia de amistad que crece en el Señor a través de la oración.
La experiencia de vida comunitaria, el conocimiento del carisma de las Hermana Dominicas de la Doctrina Cristiana y una mayor madurez hará que la hermana postulante verifique la autenticidad del llamado que le hace Dios a la vida consagrada.
Noviciado
El noviciado es una etapa que dura dos años; un tiempo ordenado por la Iglesia, para que las novicias conozcan más profundamente la vocación divina y propiamente dominicana, experimenten el estilo de vida y carisma de la Congregación, asimilen de mente y de corazón el espíritu dominicano. Es un tiempo de retiro de toda actividad habitual, dispuesta y disponible para el Señor y para la hermana. En ese tiempo conoce, profundiza, aclara, prueba, y busca consolidar la vocación a la que Dios le llama, conociendo los elementos que van a alimentar su vida consagrada y dominicana. Se trata de que en la comunidad, podamos ofrecerle una forma de vivir el Evangelio conforme al espíritu y carisma de nuestra congregación y de Sto. Domingo de Guzmán. Mientras, nuestra Congregación tratará de conocer a la hermana que desea formar parte de ella, a la vez que ella se da a conocer a quien desea formar parte de la misma.
Estudiantado
Con la profesión temporal de los votos evangélicos, la hermana se hace miembro de nuestra Congregación; esto orienta mejor su vida, la afirma en sus valores de mujer adulta, siente un íntimo y personal convencimiento de que como María, “ha escogido la mejor parte”. En esta etapa, poco a poco encausa sus valores hacia aquellas actividades que la ayuden a desarrollar mejor su propia personalidad. Se prepara aún más con el estudio teológico, doctrinal, pedagógico, etc., y en todo aquello que necesite, para ser portadora de la Buena Nueva que Cristo vino a traernos, de tal manera que sirva positivamente para la edificación del Reino de Dios.
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Votos Perpetuos
La “Profesión Perpetua” nos lleva a todos a una reflexión ¿vale la pena dar la vida por una causa? Los Votos Perpetuos de castidad, pobreza y obediencia revisten un carácter de fidelidad perpetua de vivir esos consejos evangélicos, y por eso se hacen dentro de la Eucaristía. Por ello, pasado el tiempo de la etapa del estudiantado, (Que es una etapa entre los 6 y 9 años), se realiza la Profesión Perpetua. Con ella la religiosa, se compromete definitivamente, hasta la muerte, con Dios y con nuestra Congregación de Dominicas de la Doctrina Cristiana.Con la profesión perpetua, la religiosa ha optado de por vida por el ideal y seguimiento de Cristo dentro de nuestra Congregación, para entregarse completamente amando y sirviendo a Dios por medio de la Iglesia en los más pobres y los hombres y mujeres de nuestro tiempo.
Formación Permanente
Después de hecho los Votos Perpetuos, nosotros continuamos diligentemente, con nuestra formación espiritual, doctrinaly práctica durante toda nuestra vida. Además, cada cierto tiempo, regresamos a momentos intensos de vida de oracion, de espiritualidad y vida comunitaria, reevalorando el Carisma de Nuestra Congregación a la luz del Evangelio, los documentos de la Iglesia y nuestras Leyes, con el objetivo de afirmar cada vez más nuestra vida religiosa y apostólica.
Como miembros de Cristo, nos ayudamos mutuamente a llevar nuestras cargas, con espíritu de caridad, y esto no sólo contribuye a la Gloria de Dios y a nuestra propia santificación, sino que sirve también directamente a la salvación de los seres humanos.
Nuestra vida comunitaria y nuestra vocacion de servicio y testimonio
como resultado del seguimiento de Cristo,
se traducen en una manera de ser, de vivir y de trabajar tal,
que se encierra en el Lema de nuestra Congregación
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"Seguir y Predicar a Cristo, Luz, Camino, Verdad y Vida"
(Jn. 8, 12. 14, 6)
Jesús te sigue llamando... Te sigue buscando
Conoce un poco más
de nosotras...
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Quieres ahora salir a su encuentro?
Pero... Quién es un religios@_
Los religiosos y las religiosas son esas personas que se consagran a Dios y que forman parte de una congregación religiosa, en nuestro caso, nosotras somos:
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Hnas. Dominicas de la Doctrina Cristiana.
La Vida Religiosa es una forma de vida que ayuda a que se realicen,
humana y espiritualmente sus miembros...